La orden religiosa de la Merced, fundada en Barcelona en 1218, fue una de las primeras en establecerse en Perú. Este convento es notable, en primer lugar por su pesada puerta de madera tallada, de estilo renacentista, y su torre cuadrada de estilo barroco; también, su cúpula, que domina el entorno. El claustro es también muy hermosa, con su fuente gorgoteante y sus arbustos florecientes; está rodeada por arcadas intercaladas con altas columnas. El interior de la iglesia, principalmente hecha de madera de cedro tallada, tiene un gran número de tesoros de valor incalculable: el principal es una custodia de oro sólido de 1m30 de alto, cubierto de piedras preciosas (¡1500 diamantes y 1600 perlas!).